jueves, 4 de septiembre de 2014

Guerra de Sucesión en Cataluña: 1702-1714 (Los hechos ocultados)

Este año se celebra con muchos actos en Cataluña el Tricentenario del fin de la Guerra de Sucesión en 1714 con la caída de Barcelona. Siempre es bueno recordar la Historia, pero sería mejor hacerlo desde un punto de vista algo más objetivo y no tan maniqueo y simplista. Pero parece ésta una misión imposible cuando todo se politiza. Sobre este tema hemos oído una serie de tópicos repetidos mil y una veces, que a fuero de tanta repetición muchos creen que son verdades irrefutables. Vamos a analizar algunos de ellos y vamos a exponer ciertos hechos históricos que casi siempre se ocultan:

-Cuando el rey Carlos II falleció en 1700, la corona española no quedó vacante como a menudo se afirma; al contrario, en su testamento nombró heredero a Felipe de Anjou, el famoso Felipe V, el primer rey borbón. Y se produjo la sucesión al trono de la monarquía sin mayores problemas. La guerra de hecho no estallaría en suelo español hasta dos años después y porque vino instigada desde el extranjero. Sin estas fuerzas exteriores, España habría quedado tranquila y sin incidencia alguna. 

-Las principales instituciones catalanas (Parlamento, Diputación del General (Generalitat) y Ayuntamiento de Barcelona o Consell de Cent), aceptaron sin reparos al nuevo monarca borbón y en octubre de 1701 le juraron fidelidad cuando éste vino a Barcelona. 

-En el otoño-invierno de 1701-1702 Felipe V estuvo en Barcelona, se le recibió bastante calurosamente con fiestas populares y convocó al Parlamento catalán, al que concedió casi todas las cosas que le pidieron, entre ellas poder iniciar el comercio con América con barcos catalanes. El llamado partido austracista era entonces un grupo muy reducido y sin apenas influencia. 

-Hasta 1705 (es decir cuatro años después) las instituciones políticas catalanas y la gran mayoría de poblaciones se mantuvieron fieles al borbón Felipe V; incluso en mayo de 1704 Barcelona se negó a rendirse ante el asedio y bombardeo de una flota austracista anglo-holandesa. 

-No fue hasta octubre de 1705 que Barcelona fue ocupada por tropas austracistas y fue entonces cuando las principales instituciones catalanas, que en 1701 habían jurado solemnemente fidelidad a Felipe V, pasaron a rendir pleitesía al archiduque Carlos y a reconocerlo como nuevo soberano,

-La resistencia de Barcelona en la primavera-verano de 1714 fue un acto casi suicida, decretado por una junta militar que sabía que todo estaba perdido, pues estaban completamente sitiados. Además hacía ya meses que Austria e Inglaterra habían decidido lavarse las manos y aceptar finalmente a Felipe V, nos guste o no legítimo heredero al trono. Lo más lógico y sensato habría sido rendirse, cosa que hicieron igualmente al final, pero tras largos meses de sufrimiento, hambre y miles de muertes inútiles en ambos bandos. 

-Se nos dice también a menudo que Cataluña antes de 1714 era un estado soberano e independiente. No es cierto. Des de finales del siglo XV y hasta 1714 Cataluña era un territorio autónomo que formaba parte del reino o corona de España (o de las Españas, como se decía entonces para resumir los largos títulos de rey de Castilla, Aragón, conde de Barcelona, etc). Desde finales del siglo XV, con la unión de las dos dinastías, Cataluña conservó buena parte de su autogobierno, pero el rey español nombraba desde entonces un virrey o gobernador general del Principado, sobre el que recaía el orden público y la administración de la justicia a través de la Real Audiencia. Es más, desde el siglo XII y hasta el XV, Cataluña formó parte del reino de la Corona de Aragón, en pie de igualdad con los territorios de Valencia, Aragón y Mallorca.

Para acabar y para recordar cual era el estatus político de Cataluña antes de 1714, nos puede servir como muestra que Narcís Feliu de la Penya escribió y publicó en Barcelona en 1683 un libro titulado "Fenix de Cataluña. Compendio de sus antiguas grandezas y medio para renovarlas". Pues bien este autor catalán dedica esta obra a "A la Sacra y Catholica Magestad de nuestro gran monarca Carlos Segundo (que Dios guarde), Rey de las Españas y Emperador del Nuevo Mundo". En la página 1 califica a Cataluña como "provincia", en la 7 dice que "todos los españoles somos iguales en la firmeza y adelantamiento de la Fe Catholica" y en la 35 afirma: "no tiene España raíz más anciana que la de Cataluña..."

Bibliografía consultada: Josep M. Torras Ribé "La guerra de Successió i els setges de Barcelona (1697-1714)". Barcelona: Rafael Dalmau editor, 1999; María Angeles Pérez Samper, "Felipe V en Barcelona" Cuadernos Diocechescos, Universidad de Salamanca, 2000; Joaquim Albareda Salvadó, "La Guerra de Sucesión de España (1700-1714)", Barcelona: Editorial Crítica, 2010.